El concreto postensado
22 julio, 2020Cerramientos perimetrales: Usos y tipos
30 noviembre, 2020Nadie puede predecir una pandemia y todas sus consecuencias. Tenemos ya seis meses viviendo los retos de una forma diferente de convivir, reuniendo esfuerzos para crear un nuevo entorno en medio del caos generado, tratando de contener nuevos contagios para que los sistemas de salud no colapsen, y a la vez procurando disminuir el impacto a la actividad económica del país, todo con el fin último de evitar un colapso del orden social. Con la incertidumbre de un tratamiento efectivo, viene la necesidad de vivir con el COVID-19, adaptando no solo la forma en la que interactuamos y trabajamos sino también la estructura de las ciudades y negocios.
Podemos encontrar en la historia que las pandemias han impactado el diseño de las ciudades. “Las primeras leyes urbanísticas nacieron en el siglo XIX durante la Revolución Industrial para controlar las enfermedades infecciosas. Se implantaron para aumentar el tamaño de las viviendas, como que hubiera ventilación o que llegara la luz del sol, fueron gracias al miedo a la pandemia, a la tuberculosis y a otras enfermedades similares, dice a Euronews Carlos F. Lahoz, profesor de urbanismo de la CEU San Pablo de Madrid.¨ (Rodríguez M., 07-07-2020, Las ciudades post-coronavirus: así va a transformar la pandemia el diseño urbano, Euronews.)
Se prevee que esta nueva pandemia traiga cambios a los paradigmas existentes sobre el desarrollo urbano, y se espera contemplen nuevos aspectos relacionados a la salud y un conjunto de cambios que promuevan soluciones a problemas sociales que han salido a la luz a raíz del Covid 19. Por ejemplo, el hacinamiento en que viven las familias más pobres – aspecto que incrementa las probabilidades de contagio-, la contaminación que afecta los sistemas inmunológicos que deberán batallar con futuras epidemias o brotes, así como el acceso a las tecnologías que permiten la educación virtual y el teletrabajo, dos factores que generan brechas importantes a futuro. Hay quienes piensan en la necesidad de ciudades más autosuficientes, educación en casa o virtual, espacios naturales cerca del hogar, ciudades organizadas en burbujas urbanas que permitan que las viviendas estén cerca de los centros de actividad económica, las escuelas y lugares de recreación. Ha sido manifiesta la necesidad de espacios recreativos aislados y privados cerca de ríos, montañas, o playas para que las poblaciones de las grandes ciudades tengan acceso a aire fresco, algo que no se tiene cuando se vive entre los edificios y centro urbanos sobrepoblados de las ciudades actuales.
A raiz de estas nuevas necesidades que han surgido, NACTO (National Association of City Transportation Officials) publicó un manual de estrategias urbanísticas llamada: Streets for Pandemic Response and Recovery como una herramienta que recopila prácticas que han ido aplicando algunas ciudades alrededor del mundo, aportando ideas para la reestructuración vial, social, estructural en una era donde el distanciamiento y las burbujas sociales son imprescindibles.
No se piensa solo en vacunas o tratamientos sino en la necesidad de vivir en ciudades que ya de por sí prevengan la propagación descontrolada y el colapso de centros de salud frente a una nueva pandemia que surja en el futuro. Esto exige la creatividad y capacidad de adaptación de las sociedades alrededor de todo el mundo y nos deja más inquietudes que respuestas que deberemos afrontar en conjunto.
Podemos encontrar en la historia que las pandemias han impactado el diseño de las ciudades. “Las primeras leyes urbanísticas nacieron en el siglo XIX durante la Revolución Industrial para controlar las enfermedades infecciosas. Se implantaron para aumentar el tamaño de las viviendas, como que hubiera ventilación o que llegara la luz del sol, fueron gracias al miedo a la pandemia, a la tuberculosis y a otras enfermedades similares, dice a Euronews Carlos F. Lahoz, profesor de urbanismo de la CEU San Pablo de Madrid.¨ (Rodríguez M., 07-07-2020, Las ciudades post-coronavirus: así va a transformar la pandemia el diseño urbano, Euronews.)
Se prevee que esta nueva pandemia traiga cambios a los paradigmas existentes sobre el desarrollo urbano, y se espera contemplen nuevos aspectos relacionados a la salud y un conjunto de cambios que promuevan soluciones a problemas sociales que han salido a la luz a raíz del Covid 19. Por ejemplo, el hacinamiento en que viven las familias más pobres – aspecto que incrementa las probabilidades de contagio-, la contaminación que afecta los sistemas inmunológicos que deberán batallar con futuras epidemias o brotes, así como el acceso a las tecnologías que permiten la educación virtual y el teletrabajo, dos factores que generan brechas importantes a futuro. Hay quienes piensan en la necesidad de ciudades más autosuficientes, educación en casa o virtual, espacios naturales cerca del hogar, ciudades organizadas en burbujas urbanas que permitan que las viviendas estén cerca de los centros de actividad económica, las escuelas y lugares de recreación. Ha sido manifiesta la necesidad de espacios recreativos aislados y privados cerca de ríos, montañas, o playas para que las poblaciones de las grandes ciudades tengan acceso a aire fresco, algo que no se tiene cuando se vive entre los edificios y centro urbanos sobrepoblados de las ciudades actuales.
A raiz de estas nuevas necesidades que han surgido, NACTO (National Association of City Transportation Officials) publicó un manual de estrategias urbanísticas llamada: Streets for Pandemic Response and Recovery como una herramienta que recopila prácticas que han ido aplicando algunas ciudades alrededor del mundo, aportando ideas para la reestructuración vial, social, estructural en una era donde el distanciamiento y las burbujas sociales son imprescindibles.
No se piensa solo en vacunas o tratamientos sino en la necesidad de vivir en ciudades que ya de por sí prevengan la propagación descontrolada y el colapso de centros de salud frente a una nueva pandemia que surja en el futuro. Esto exige la creatividad y capacidad de adaptación de las sociedades alrededor de todo el mundo y nos deja más inquietudes que respuestas que deberemos afrontar en conjunto.